La población penitenciaria por delitos federales pasó en México de 3.164 en 2006 a 18.283 en 2011, lo que corresponde a un aumento de 478 %, informó hoy el secretario mexicano de Seguridad Pública, Genaro García Luna.
García Luna reveló que los internos de mediana y alta peligrosidad en cárceles estatales que tengan antecedentes federales serán reacomodados a partir del 20 de marzo en los 12 Centros de Máxima Seguridad del Sistema Penitenciario Federal.
Según el funcionario, el traslado de los reos por delitos federales, es decir, de narcotráfico y delincuencia organizada, que se encuentran en cárceles estatales tiene por objeto garantizar la seguridad dentro de los centros penitenciarios.
Las declaraciones del responsable de la seguridad pública en México se producen después de la matanza de 44 reos el 19 de febrero en un penal del norte de México.
Supuestos miembros del cártel del Golfo fueron asesinados en el penal de Apodaca (en el norteño estado de Nuevo León) por presuntos integrantes del cártel de Los Zetas, que utilizaron el tumulto creado en la prisión para fugarse.
García Luna inauguró este martes dos módulos del Centro Penitenciario Noroeste, ubicado en El Rincón, Nayarit, cuya inversión fue de 2.000 millones de pesos (unos 156 millones de dólares).
El Centro cuenta con tecnología punta para la transferencia de información, incluyendo huellas dactilares, reconocimiento de voz, ADN e información en general y perfil delincuencial de los internos que ingresen a los penales federales.
Según el funcionario, el sistema penitenciario federal “es capaz de albergar a internos del fuero común que, por su nivel de peligrosidad, requieren de un nivel máximo de seguridad y, por primera vez, cuenta con espacios especializados para mujeres”.
EFE