Leticia Arana
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Guadalajara, Jalisco
Desafortunadamente a pesar de que existen restricciones para la venta de artefactos o productos manuales con pólvora y que los municipios son directamente responsables de autorizarlo y supervisar que no ocurra, continua en Jalisco el mercado negro, ya que su comercialización se ha proliferado no solo en tiendas de abarrotes de las colonias, sino infortunadamente también en farmacias, lamenta el director de la Unidad Estatal de Protección Civil, Mayor, Trinidad López Rivas:
“…Hay un reglamento que prevé que no deben venderse, permitirse en la vía pública y lo están haciendo: que deben venderse en un lugar expresamente para que se venda exclusivamente ese material, porque es muy común que va usted a algunas colonias a las tiendas de abarrotes y venden pólvora ahí, hasta en farmacias, exponiendo su vida de ellos, clientes y su patrimonio..”
Urge se implemente ya intensa regulación oficial, hacer una ley, y por supuesto el protocolo de supervisión municipal, para prohibir y sancionar esta venta al público en general. Detalla que no son aisladas las tragedias ocurridas en domicilios particulares y en plena calle, por la portación de estos productos y su detonación que, a manera de juego, hacen menores de edad y adolescentes, quienes generalmente realizan esto sin la vigilancia de sus padres.