Leticia Arana
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Guadalajara, Jalisco
Las empresas constructoras, o bien desarrolladoras inmobiliarias de vivienda, transfieren el costo de la multa impuesta por alterar el impacto ambiental, al precio de las viviendas, que asume irremediablemente el cliente, denuncian integrantes de la Federación de Abogados de Jalisco, en voz de su presidente, Rodolfo Casanova , una práctica , afirma, que aunque no es reciente , si amenaza con convertirse en un “modus operandi comercial” para garantizar intereses y ventajas económicas a quienes lo promueven:
“…Lo que hacen los constructores, es contratar a los especialistas, hacen una cuantificación, -haber dime -cuánto vale el impacto ambiental que voy a generar-, lo prorrateamos por el costo de cada una de las casas, y lo termina pagando el cliente…”
Indica que ante esta situación y a fin de contribuir al cuidado del medio ambiente, iniciaron una serie de foros itinerantes para detectar las zonas más afectadas.
Cabe señalar que gran parte de las ganancias de muchas inmobiliarias, se basa en esta alternativa que resulta irregular, como se ha constatado en sitios turísticos principalmente, donde el costo de los inmuebles se duplica ante la rentabilidad que representa , o bien su demanda, como es el caso de Puerto Vallarta en Jalisco, o Manzanillo, Colima, por dar ejemplos más próximos.
Por otra parte, no es de extrañar la serie de “arreglos” así como convenios participativos que establecen empresarios constructores con autoridades municipales o estatales, para conseguir permisos de construcción, sin tomar en cuenta la alteración al medio ambiente, diversos ecosistemas y usos de suelos.