El rector de la universidad de Guadalajara (oeste), segunda ciudad de México, pidió el viernes investigar los nexos con grupos políticos de la Federación de Estudiantes en cuya sede fueron hallados cinco cadáveres, tres de los cuales ya fueron identificados.
El rector Marco Antonio Cortés pidió que se investiguen el apoyo político oculto que le permite seguir operando a la Federación de Estudiantes de Guadalajara, al admitir que era conocido que esa organización extorsiona a vendedores ambulantes cobrándoles una cuota por operar.
La federación “tiene apoyos tras bambalinas porque ya no representa nada al interior de la universidad y sigue operando sólo para cobrar cuotas a comerciantes”, denunció el rector a la radio MVS. La universidad convocó este viernes a una protesta por los crímenes.
Los tres cuerpos identificados corresponden a estudiantes reportados desaparecidos el sábado y faltan por identificar los de un joven de 21 años y un adulto de 51, según la fiscalía del estado de Jalisco cuya capital es Guadalajara, a 550 km de Ciudad de México.
Una fuente de esa fiscalía dijo a la AFP bajo anonimato que “la línea de investigación más fuerte, es que el señor fue acompañado de su hijo y otros tres estudiantes a negociar con la Federación el aumento de cuotas por vender churros (postres de harina) y se enfrentaron” con integrantes de la Federación.
Los cuerpos estaban en una fosa clandestina cerca de unas canchas deportivas en la parte trasera del extenso complejo de la Federación, de 57.000 m2, cedido por el gobierno local a los estudiantes.
El hallazgo de los cuerpos ocurrió 48 horas después de la violenta represión policial en la que murieron a balazos dos estudiantes que protestaban en el estado de Guerrero (sur) aunque las autoridades descartaron cualquier nexo entre los dos hechos.