Carolina Gómez Aguiñaga
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Puerto Vallarta, Jalisco
A pesar del anuncio de la prohibición de bebidas alcohólicas para llevar y venta de cerveza en playas, dicha situación fue la constante durante la semana santa en Puerto Vallarta. A ello el alcalde Ramón Guerrero sólo atinó a decir que su regulación “es un reto”, cuando al mismo tiempo se están invirtiendo recursos públicos para limpiar la imagen de la ciudad, la cual se impregnó de un tufo de orines el fin de semana.
“Estuvo procediendo Inspección y Reglamentos a clausurar y también depende de Semarnat que nos ayude a combatir la venta de cerveza en playas”, dijo el presidente. En cuanto a las bebidas preparadas que se vendieron al por mayor en el Malecón, tanto en establecimientos nuevos como en las discotecas, comentó “es un reto, así como estamos regulando el tema de la imagen urbana, también tenemos que regular los giros”.
Sin embargo la realidad que vivió Puerto Vallarta fue otra, pues en la playa del “holy” y en Bocanegra se instalaron mesas y hieleras con venta de cerveza y bebidas preparadas e incluso los guaruras del coronel Silvestre Chávez resguardaron algunos puestos del padre de la regidora de Movimiento Ciudadano Doris Ponce
No obstante, el alcalde aseguró que Reglamentos le reportó 270 actos en los que intervino, entre levantamientos de actas y clausuras.