Los hispanos serán a principios del próximo año el grupo étnico más grande en el estado más poblado de Estados Unidos, informó el jueves el Departamento de Finanzas de California, al destacar un hito revelador del dilatado cambio demográfico que ya modificó el equilibrio político del poder, la economía y la cultura.
El pronóstico de que los hispanos igualarán el número de los blancos en California para mediados de este año y de que los superarán a principios de 2014 fue anunciado en la propuesta presupuestal del gobernador Jerry Brown a comienzos de enero, pero las nuevas cifras presentan una imagen mucho más detallada de la manera en que el cambio se reflejará en los grupos por edad y las regiones geográficas en las próximas cinco décadas. Los blancos y los hispanos constituyen ahora cada uno el 39% de la población del estado.
En 2020, los hispanos representarán el 40,7% de la población y los blancos formarán el 36,6%. En 2030, la población será 43,9% hispana y 34,1% blanca.
En 2060, los hispanos constituirán el 48% de la población contra el 30% que representarán los blancos.
De acuerdo con la predicción, los negros disminuirán de casi 6% en 2010 a poco más de 4% en 2060, mientras que la comunidad asiática, por ahora menor al 13%, tendrá un aumento ligero.
California es el segundo estado del país donde los hispanos son el grupo racial o étnico más grande, después de Nuevo México. Los blancos no son ahora la mayoría en únicamente dos estados: Hawai y Nuevo México.
En Texas, los hispanos parecen encaminarse a ser el grupo poblacional más numeroso dentro de 10 años, aseguró Mark López, director adjunto de la organización Pew Hispanic Center, que estudia las tendencias demográficas. Habrá de pasar mucho tiempo para que otro estado tenga ese hito, dijo.
“Este es un hito importante porque California y Nuevo México son únicos”, indicó López. “California tiene sus propias características (debido a su tamaño”.
El cambio poblacional se ha desarrollado en la década anterior cuando los hispanos han ocupado más cargos elegidos por votación, como dos vicegobernadores, el alcalde de Los Angeles y relevantes puestos directivos en la legislatura estatal, puntualizó el profesor Louis DeSipio, que imparte ciencias políticas y estudios sobre el chicano/latino en la Universidad de California en la ciudad de Irvine.
La aprobación de una propuesta en 1994 para reducir servicios a los inmigrantes sin permiso para estar en Estados Unidos fue un momento decisivo, pues muchos hispanos decidieron hacerse ciudadanos y registrarse para votar, refirió DeSipio. La redistribución del mapa de los distritos legislativos después del censo de 2000 fortaleció su influencia en las elecciones.
El informe está basado en datos del Buró Estadounidense del Censo y del Departamento de Salud Pública de California, así como de estadísticas y estudios de expertos en planificación de condados y de concejos regionales.
AP