El Pinocho de Esopo

Por Edel García

Algo tienen en común Geppetto y Esopo, y es que ambos hablaron de mentirosos compulsivos. Pero no quiero ser trillado y pensar en narices grandes, más bien en fábulas esta vez. Contaba Esopo el fabuloso, como lo llamo, que cierta vez un muchacho conociendo el miedo que producía en su pueblo la noticia de la presencia del lobo, se la pasaba dando falsos avisos de que venía. La gente se preparaba porque le creían hasta que se hartaron de sus mentiras y cuando en realidad llegó el lobo nadie le creyó. ¿Imaginan qué paso no?

La moraleja de esta historia es que mentir es una conducta deplorable que desacredita a quien la arguye. De pronto la verdad se confunde con la mentira y ya no se sabe distinguir, ni nada creen de uno. Sin embargo, un mentiroso casual es más letal que uno enfermizo. El primero es intencional y selectivo, el otro no sabe ni que hizo mal, no tiene crítica ¿Quién queda mal? ¿Las personas por no creer las palabras o los mentirosos por decirlas?

El escenario

Durante la campaña de elecciones por la Presidencia Municipal de Puerto Vallarta hubo una pelea hasta el último momento entre dos partidos: PRI y MC. Dicen los expertos que el PAN en Humberto Muñoz encontró un candidato frío y distante con las masas. Antipático. En el candidato rojiblanco Adrian Méndez hallaron falta de apoyo partidista y poca sangre en las venas. Aun cuando quisiera seguir la senda de los jóvenes que erigiera como ganador al ex alcalde Salvador González Resendiz.

Finalmente concordaron que una parte fundamental de la victoria de Ramón Guerrero se debió a su orientación al pueblo, el desastre del mandato saliente y la suerte de los Mochivales.

Mucho pueblo se apuntó y vendió su democracia descaradamente. Votando por candidatos que ni conocían bien ante la promesa de un mejoramiento en tejas y cemento. Arriesgando un Municipio por la necesidad personal. La mentira de hoy es que el MC no atribuye a su autoría la idea de los dichosos vales sino que alega que son una estratagema esgrimida por el PRI para desestabilizar.

Destape de suspenso

En una afamada rueda de prensa, semanas antes de la ley mordaza, el edil vallartense sentenció que la idea de los vales entregados salió de las oficinas del PRI. Es una falacia y que se desentiende de su validez a partir de enero que es cuando entraran las personas a reclamarlos. Lo que sigo sin entender es por qué un partido tendría que separar dinero para confeccionar un plan siniestro y hacer vales a nombre del MC siendo que los votos irían para otro lado y no para el PRI. A lo mejor en otro país pero no en Vallarta.

Tan caliente es este asunto que hace unos días, alrededor de doce personas se reunieron ante el Ayuntamiento para exigir la validez de los Mochivales negados. La sentencia de todos era que los dichosos vales fueron entregados por integrantes del equipo de campaña de Ramón Guerrero días antes de las elecciones. ¿Extraño no? Pues sigue la cola, porque implicaron en acto presencial de

entrega a los regidores Susana Mendoza Carreño, Candelaria Villanueva y Humberto Gómez Arévalo.

A este último le quisieron enseñar un vale firmado por el “Beto” en la colonia Playa Grande, cuando visitaba con sus asistentes en campaña a las personas. Es una lástima que no pudo estar ese día porque estaba enfermo. Tal vez los ciudadanos reunidos allí confundieron los Mochivales con vales de estética. Quizás no pudieron distinguir entre materiales de construcción y peinados con descuento que ofrecía el Mochilas en el Pitillal. No se sabe bien…

Alegaba una ciudadana que fue incluso amenazada en una llamada a casa presumiblemente por el regidor Humberto Gómez. La amenaza es ir a la cárcel si continuaban con las exigencias. Qué lindo, ganan y luego se olvidan de las promesas hechas, y la forma en que fueron hechas. Perdonen pero esto no es seriedad es cobardía.

Ya se sabe qué hablaron en el Hotel el grupo de gobierno del alcalde con estas actitudes hacia el pueblo. Hay que recordar que los ciudadanos no tienen la culpa de que no haya dinero, ni que arreglen los baches de la calle, ni que porque los hayan ayudado en el paro de ayer se desentiendan de ese modo. Entiendan de una vez que lo que se debe hacer porque es tu trabajo no se premia, a pesar de que aquí lo parezca.

Los dados en gobierno

Finalmente se hirvió tanto el ambiente en el Ayuntamiento que ahora se pasan la bola entre todos. Ramón Guerrero no habla, tampoco es Jaime Castillo Copado, ahora le toca el turno al Procurador Social Municipal Juan Hernández. La conducta, esperada, que le vayan a exigir a la dirigente del PRI en Vallarta Gloria Palacios pues ella debería dar la cara para dar respuesta.

No hubo diálogo porque sencillamente el pueblo no entiende algo. Cómo es posible que te entreguen un vale, una mochilita naranja, una pluma por el voto al MC siendo del PRI ¿Conocen ustedes a un PRI tan inteligente, inversionista y calculador a ese extremo? Pues parece que van a todas la consecuencias legales que esto implique, son inocentes como Pinocho pero con una nariz muy grande que los delata.

Hay un dicho que dice que si juegas con el mono, le vas a conocer las cosquillas. Pues bien, ahora no solo hay que hacer malabares con la falta de dinero y los juicios en la Alcaldía, sino que hay que enfrentarse a la oleada de gente y acusaciones legales que hará Gloria Palacios. Se viene con todo, exige fotos, vales, tarjetas de presentación, lo que sea para desenmascarar al chaparrito de Juan Hernández. El fin…interponer una denuncia ante la PGR contra el funcionario.

Las consecuencias de las mentiras afectan a todos, duelen a todos, pero lo peor…desacreditan. ¿Verdad Pinocho, no es cierto Esopo?