Humberto Muñoz Vargas se fue el domingo a la comida del ejido Ixtapa. Al ritmo de música de banda, el director del Seapal emuló a los dos grupos de ejidatarios que aprovecharon el evento para hacer trabajo político. Al sitio también fe invitado Andrés González Palomera quien recorrió todas las mesas saludando y presentándose a los ejidatarios. El presidente municipal, Salvador González Reséndiz también pasó mesa por mesa saludando a los presentes.
Pero bueno, el domingo nos atrajo el interés Muñoz Vargas. Estaba en la mesa de invitados de honor, atendido siempre por el presidente del ese núcleo ejidal Héctor Becerra. Fue objeto de comentarios en otras mesas donde departían el momento personas que lo conocen.
En el transcurso de la tarde hubo tres charlas breves con Muñoz Vargas. Un comentario resume todo: ya
hay acuerdo definitivo con Juan José Cuevas García y van juntos a la disputa por la candidatura del Partido Acción Nacional a la presidencia de Puerto Vallarta.
No es de nuestro interés consultar al diputado federal respecto a si es cierto o no. En los hechos, “el peri” desde hace rato que abandonó la carrera por la candidatura a la alcaldía. Sus seguidores ha sido interesados y ellos se han encargado de darle difusión.
Hasta donde sabíamos, el grupo del Peri Cuevas estaba en pláticas negociando con quien aliarse. Es evidente que por el lado de Ramón Guerrero Martínez, tenían las puertas cerradas. Hubo demasiado golpeteo hacia “el mochilas” por los amigos del diputado federal. Y los mochilistas a su ves reclamaron la deslealtad del “Peri”, de que dicen que si pudo ganar la diputación fue gracias al apoyo que en campaña le brindó Ramón Guerrero. Al acercarse a Muñoz Vargas y armar aquel bloque de antimochilistas, “el peri” renunció al respaldo del “mochilas”.
El optimismo de Muñoz Vargas en que él será el abanderado del PAN a la alcaldía tiene una argumentación que a ellos les parece sólida y
razonable. Finalmente, el PAN se someterá al método tradicional del voto de militantes activos para elegir al candidato a la alcaldía. Casi todos han hecho cuentas y los números de Beto Muñoz les hacen ver que ellos le ganarán la partida a Ramón Guerrero. Tienen confianza en ser suficientes los votos que aporte el grupo del finado Chema Ibarría, el grupo de Juan José Cuevas y el voto del grupo del propio Muñoz Vargas.
Desde fuera se observa que al interior del PAN hay una sorda lucha entre los grupos que apoyan a los distintos precandidatos. La gente del “Mochilas” recrimina las ansias de descalificar por cualquier motivo al legislador local. No se les olvida el inexplicable deslinde que el presidente del partid, Jesús Ruiz Higuera hizo cuando los priistas denunciaron al “mochilas”. Mas allá de ser desechado la denuncia al interior del Instituto Electoral, la posición de Ruiz Higuera fue interpretado como una pose de parcialidad en detrimento de Ramón Guerrero.
El método tradicional ayuda en cierta parte las aspiraciones de Muñoz Vargas. Con él se la juegan panistas del ala tradicional que le han sido leales al cabo de dos décadas de militancia. Su grupo es el
más sólido y de mayor presencia en el PAN. Esa militancia la asumen como el derecho que ya les corresponde encabezar la candidatura. Beto, Pina Ibarría, “el peri” sienten que ellos ya ganaron y derrotaron al “mochilas” en la elección interna.
La apuestan pues a la militancia. “El peri” ha vendido la falsa idea de que él logró afiliar a 200 nuevos militantes. Revisado el padrón y los nombres de los nuevos activos, en realidad son 48 nuevos afiliados y de ellos, la mayor parte, 38 para ser exactos, son reclamados como votos seguros para el “mochilas”. Esos 48 recién activados pesarán en buena medida contra la influencia del voto de las familias tradicionales del panismo, entre las que se cuentan los Muñoz Vargas.
Hay otros datos a considerar. En la capital del estado, también en la capital del país, los grupos están en plenas negociaciones. Discuten perfiles y nombres de aspirantes que eventualmente pueden darle resultados positivos al partido. En los grupos del ex gobernador, Francisco Ramírez Acuña, del gobernador Emilio González Márquez, de Abraham González Uyeda, de Hernán Cortés, pesa mas la influencia de Ramón Guerrero que la de otros. Esto también al margen del juicio que emita en su
momento la Comisión Nacional de Elecciones que si no contamina su decisión, deberá darle luz verde al proyecto mas fuerte.
En este momento no se disponen de mayores elementos como para vaticinar que Muñoz Vargas ha amarrado la candidatura al cerrar acuerdos con Pina Ibarría y Juan José Cuevas. Ellos hacen lo suyo. Hacen enojar a los mochilistas repitiendo el mensaje de que el panismo no debe elegir a un candidato. Los vallartenses no van a votar por un fuereño. Al fin y al cabo, también en la guerra electoral todo se vale.
Los mochilistas manejan un dato que creen es argumento total para quedarse con la candidatura. Sostienen que en todas las encuestas, levantadas por priistas y panistas, es “el mochilas” el mas aventajado. Por eso los priistas lo quieren tumbar. Reprueban que hay panistas con las mismas intenciones que los priistas, las de descalificar por cualquier cosa al diputado local.
No deja pues de ser curioso que una corriente de panistas se unen en contra de Ramón Guerrero por repartir cemento, láminas de cartón, otros apoyos en comunidades y colonias marginadas. A la militancia se le puede perdonar esas descalificaciones al mochilas” pero cuando el presidente del CDM l
descalifica y se deslinda, es visto como una postura parcial. Eso si debe ser reprobable, que el dirigente tome partido a favor o en contra de un aspirante. Total, todos los aspirantes y de todos los partidos hacen campaña a base de la misma estrategia.
Revolcadero
Decíamos al inicio de este espacio que dos grupos de ejidatarios estaban el domingo en plena faena. Durante todo el convivio se dedicaron a recorrer las mesas haciendo campaña. Por un lado, los del grupo que tienen el control del ejido, encabezados por Marco Antonio Ortiz Fernández que regresa otra ves y quiere repetir en la presidencia del ejido. “el cepillo” logró reclutar del grupo adversario a Angelito Avalos que va en su planilla. Alejandro de Dios, aquel que fue agente municipal de El Colorado, también va en la planilla. Si ganan la elección, el encargado de cuidar el dinero, será Santiago Flores. En tanto, el grupo que en otros años apoyó a Lino Ortiz Muñoz se le jugará con Marco Antonio Mora Ortiz. El segundo de esta planilla es Sergio González subgerente de Aeroméxico.****** el domingo aprovechamos para saludar a los amigos
de Andrés González Palomera. Son los que lo acompañan a todo sitio donde es invitado su candidato. Mientras Andrés recorría todas las mesas, Chabelo (aquel legendario chef del desaparecido restaurante Balam de la calle Basilio Badillo) afinaban detalles con Beto el del Infonavit, sobre las nuevas estrategias. Ellos apuestan a que Andrés le ganará de calle a Adrián “el archi” Méndez. Claro, si no hay chanchullos. Si nos ganan a la mala, “me voy con “el mochilas” decía el dueño de la estética del Info. Eso si, nos presumen que hombre por hombre, el equipo de Andrés es el mejor. “Nomás copara a (Juan Carlos) Peralta con Abel Chávez” nos pidieron. Peralta y Abel Chaves, le manejan la campaña mediática al “archi” y a Andrés respectivamente.****** En Ixtapa, a los ejidatarios no les pasó desapercibido el desdén de Adrián Méndez a la invitación, que prefirió irse a la fiestas de la inauguración de los corrales de Armando Villaseñor, allá en las inmediaciones del Colorado. Uno amigo nuestro le marcó y le marcó pero nunca contestó el teléfono. Sabía que Andrés González le sacó ventaja al aprovechar la comida para darse a conocer entre los que no lo conocían.