Un repartidor de pizza del estado de Tlaxcala, en el centro de México, fue asesinado por un cliente que no toleró un retraso de 40 minutos en la entrega de su cena, aseguró el jueves la fiscalía estatal.
Antes de matarlo, el descontento cliente lo encerró, lo golpeó y lo apuñaló, añadió el parte oficial.
Las autoridades encontraron el cadáver el lunes con los ojos vendados y maniatado en el municipio de Tetla, ubicado a unos 140 kilómetros de la capital mexicana. Las investigaciones concluyeron que el repartidor de pizza murió desangrado.
Durante la investigación, se conoció que el repartidor, Andrés Díaz, fue visto por última vez el sábado cuando salió con un pedido de un cliente que posiblemente ya había reclamado con palabras altisonantes una pizza tardía.
Los investigadores acudieron al domicilio del cliente en busca de pistas, sin embargo, este respondió violentamente y golpeó a uno de ellos, el cual había descubierto la moto del repartidor.
El cliente, José Luis Lima, de 22 años, reconoció que recibió al repartidor con un golpe, lo metió a su casa y con la ayuda de su mujer, continuó con el castigo, que terminó con un encierro de cinco horas atado. Cuando el repartidor intentó huir, pero Lima lo atacó con un cuchillo, lo llevó a un terreno baldío y lo asesinó.
Una competición de elaboración de pizzas. Un repartidor de pizza del estado de Tlaxcala, en el centro de México, fue asesinado por un cliente que no toleró un retraso de 40 minutos en la entrega de su cena, aseguró el jueves la fiscalía estatal.