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La tortura en México es una práctica “sistemática y generalizada”, según AI

viernes, 12 de octubre del 2012

 

 

La tortura y los malos tratos constituyen una práctica “sistemática y generalizada” que se ha incrementado “considerablemente” en los últimos seis años de Gobierno de Felipe Calderón en el marco del combate al crimen organizado, según un informe presentado hoy por Amnistía Internacional (AI).

Los datos de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), recogidos en el informe, muestran un incremento de más del 300 % entre las 392 denuncias recabadas en 2007 y las 1.669 de 2011, unas cifras que según el director de Amnistía Internacional México, Alberto Herrera, esconden una situación aún más grave.

“Debido a que la CNDH solo está a cargo de intervenir cuando existen funcionarios públicos federales presuntamente responsables de la comisión de abusos, podemos concluir que estas cifras revelan apenas una pequeña parte de la realidad”, indicó el responsable de AI durante la presentación del documento en la capital mexicana.

Agregó que el reconocimiento del Gobierno federal de que alrededor del 90 % de los delitos se cometen en el fuero común (estados y municipios) y el conocimiento de casos de torturas en las 31 entidades federativas y el Distrito Federal muestran que es una práctica “generalizada” y “sistemática” en el país.

Además, alertó de la existencia de un elevado número de casos que no se denuncian por la falta de confianza en un sistema de justicia que, según el informe, procura “impunidad” a los responsables y “expone a las víctimas y a los testigos a sufrir represalias”.

El aumento de los casos de tortura y malos tratos se ha producido, de acuerdo con el informe “Culpables conocidos, víctimas ignoradas”, en un contexto de “severa crisis de seguridad pública”, en la que más de 55.000 personas han sido asesinadas y al menos 160.000 se han desplazado por la violencia entre carteles.

Aunque reconoce que las autoridades mexicanas han adoptado algunas medidas para reducir la tortura, la organización indica que “las limitaciones de esas medidas y su ineficaz aplicación ponen en duda la voluntad política existente para erradicar la constante de tortura e impunidad que se mantienen en el país”.

AI documenta numerosos casos de tratos crueles, inhumanos o degradantes cometidos por personal militar y agentes federales, estatales y locales en un informe que presentará ante el Comité contra la Tortura de Naciones Unidas, que examinará en noviembre el cumplimiento de los compromisos de México.

Junto a un llamado “urgente” a las autoridades para que pongan fin a esta práctica, enumera una serie de recomendaciones, como establecer una base de datos fidedigna y nacional, crear una unidad especial dentro del Gobierno de combate a la problemática o un registro de los detenidos para evitar torturas previas al juicio.

“Aunque no es posible asegurar que el dramático incremento se deriva de una instrucción oficial, es evidente que los procedimientos oficiales o modelos de operación instalados tienen como consecuencia esta realidad”, aseveró Herrera.

La organización de derechos humanos insta al presidente electo, Enrique Peña Nieto, quien asumirá el cargo el 1 de diciembre, a concretar y hacer público un plan que incluya medidas concretas para revertir este clima “donde la tortura es una práctica habitual y la impunidad una realidad prácticamente absoluta”. EFE

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