Nayarit: luces de alerta

En Nayarit, la emboscada al director de la Policía Estatal Investigadora, Guillermo Romero Robles, balacera que concluyó con algunos heridos y la muerte de uno de sus escoltas, conmocionó a la clase gobernante, los intocables de siempre que parecen advertir que sobre ellos se cierne una amenaza que creen mas seria que nunca.

El funcionario estatal regresaba a la capital de Nayarit procedente del vecino municipio Bahía de Banderas. A la altura del crucero del poblado El Refilión, a la altura de “la curva del diablo”, una camioneta se les atravesó y de las faldas de los cerros los pistoleros accionaron sus armas. Una señora quedó a mitad del fuego cruzado y también resultó con heridas de plomo. Balas y esquiarlas de granada causaron las heridas.

La información oficial difundida por el aparato de comunicación social del gobierno estatal confirman lo que desde la noche del jueves informaron medios de comunicación. El tiroteo se originó pasadas las ocho de la noche. No hay datos duros sobre el número de agresores pero se considera que se trató de un comando armado bien organizado y mejor armado. El vehículo bandera obligó a detener la marcha de la camioneta suburban donde viajaba el jefe judicial y escondidos en los matorrales, los pistoleros hicieron lo suyo. Los escoltas respondieron el fuego. Algunas versiones indicaron que hubo hasta detonaciones. Cuando los pistoleros creyeron haber cumplido su tarea salieron de sus escondites y huyeron en varias camionetas.

Hasta ahí mas o menos la crónica de cómo sucedieron los hechos. Ante el sorpresivo ataque, los escoltas se preocuparon por la seguridad de su jefe, auxiliaron a los heridos, pidieron apoyos, llegaron ambulancias aunque al final, en patrullas trasladaron a los heridos a un hospital privado de la capital del estado. En el transcurso de la noche, rastrearon la zona y hallaron a una persona ejecutada. Extraoficialmente se dijo que era el dueño de la camioneta que les atravesaron en la cinta asfáltica. Que lo despojaron de la unidad para cometer su fechoría.

Hay muy pocos antecedentes de altos funcionarios estatales que hayan sido víctimas de un atentado de esta naturaleza. En tiempos de Ney González Sánchez acribillaron a Julio Cesar Jiménez Arcadia quien en su momento también encabezó las estructuras de mando judicial. Sin embargo, a él lo ejecutaron ya cuando se había separado de su cargo. A diferencia del comandante Romero Robles, a Arcadia se le vinculaba con grupos del crimen organizado.

El atentado en cuestión ocurre cuando apenas se cumplen los dos primeros meses de la gestión de Roberto Sandoval Castañeda. Su grupo de trabajo salió de inmediato a dar su posición ante el hecho. El secretario general de gobierno, José Trinidad Espinoza Vargas convocó a los mandos de las fuerzas armadas y frente a ellos dijo que el estado no cederá a las presiones del crimen organizado.

Espinoza Vargas tiene experiencia en el periodismo. No titubeó al dar por hecho que detrás de la emboscada fue al comandante de la llamada Agencia Estatal de Investigaciones están miembros de la delincuencia organizada. No dijo si tiene elementos para sostenerlo perlo tampoco nadie tiene dudas de que así es.

La clase política de Nayarit observa no sin  preocupaciones el hecho. Quién sabe si sea miedo pero reaccionaron temerosos, atentos al comportamiento del suceso en los siguientes días.

Hay razones para sentir lo que sienten. Primero, la racha violenta no tiene fin y lo mismo aparecen ejecutados en la capital que en su periferia, en los municipios serranos o al norte del estado. Si acaso Bahía de Banderas escapa da la espiral de violencia.

Hay un segundo dato y tiene origen en la voz popular. Mucho se habla de que al interior del gobierno de Roberto Sandoval, funcionarios allegados a él están coludidos con grupos de criminales. Inclusive, es común escuchar graves señalamientos en contra del gobernador.

Un pequeño detalle que no pasó desapercibido por nuestros amigos de Tepic fue la ausencia del gobernador Sandoval. Se escondió y mandó a su secretario de gobierno a reunirse con los jefes de las fuerzas armadas y enfrentar a la prensa. Evadir responsabilidad es una conducta cobarde y quien incurre huye a sus compromisos generalmente responde a un tercer compromiso pactado a escondidas. Ese compromiso pesa mas al pactado con la sociedad.

Roberto Sandoval ya antes se ha escondido en momentos apremiantes. Cuando una balacera en la avenida Insurgentes en pleno domingo, el gobernador Ney González le reclamaba a Sandoval, en esos días presidente municipal de Tepic, salir y dar la cara al pueblo. Ney González le restregó que siempre que había balaceras en la capital, Roberto Sandoval se escondía.

Nadie tiene una explicación sólida del por qué el gobernador se esconde. Nadie le pide lo que él en  sus días de campaña prometió, que él acabaría con la violencia y punto. Pero, son los policías que cuidan de él y de ellos los que pagan las consecuencias y los que enfrentan a los criminales. Y él, quién sabe donde andará, donde se oculta, que no parece tener el valor suficiente de salir a dar la cara. Todo es una conducta tan rara como sospechosa.

En los tiempos de Ney González se le insistió en pedir el apoyo de las fuerzas federales. Ney González respondió una y otra ves con informes que donde se alteraba la realidad y se escondía la violencia. Al menos hoy, a iniciativa del secretario de gobierno, ya hay iniciativa de reconocer que la violencia se ha apoderado de Nayarit, de su capital. Luego de platicar en privado con los comandantes de la 13 zona militar y de la VI Zona Naval, Gilberto García García y Alejandro Salomón Velmar, se anunció que ya iban camino a Nayarit 150 policías federales.

En Nayarit, sobre todo en laos municipios de la zona norte, ya había presencia de agentes federales. Sin embargo, Ney González no los quería en la capital y prefería esconderlos dizque parta no alertar ni alarmar a la ciudadanía. Tepic es pacífico, no hay violencia, son hechos aislados, coletazos de la violencia en otros estados, son consecuencias del fenómeno cucaracha,  respondía invariablemente todas las veces que se le cuestionaba en torno alguno suceso violento.

Cometido el atentado contra el alto jefe judicial, la reacción es otra. Es natural cuando el sexenio apenas empieza. Ojalá que reconocer la realidad no obedezca a un manotazo para salvaguardar la integridad de ellos, de esa clase política que se siente amenazada.

Revolcadero

En Tepic mucho se habla de que pudieron haber sido elementos del propio aparato de fuerzas judiciales los que “pusieron” al comandante Guillermo Romero Robles.  Nadie se explica de dónde surgió la información de la hora precisa que los funcionarios pasarían por esa zona. Si es cierto lo que ya se rumora, colaboradores del comandante estan coludidos con los malosos y ellos dieron la información precisa de la hora del retorno de Bahía de Banderas.***** Nuestros amigos del PRI están en todas ya todas van. Se nota que Gloria Palacios el Gaby Salcedo, Cesar “Lucas” Langarica Santana, quieren mantener vivo al partido. El jueves, Lucas nos envió la información donde informa de la organización del certamen Señorita Revolucionaria 2011. No sabemos si hubo antes u   certamen de esta naturaleza pero bueno, al menos es buen inicio para sembrar una nueva tradición. Que el evento se celebra hoy sábado. Es una forma de recordar el aniversario 101 de la Revolución Mexicana y para que todos participen. Se invitó a todas las organizaciones adherentes al partido. Que son 12 guapas  chicas listas para competir por la corona exhibiendo sus carrucheras. Van a la pasarela: la cetemista, Marisol Ruiz; la campesina, Alondra Torres; la feminista, Diana Gómez; la revolucionaria, Diana Ayón; la territorial, Magaly Reynoso; la juvenil, Analy Briones; la demócrata, Jennyfer Chávez. Bueno, hasta Jorge Mendoza Bernal, del Grupo Río mandó a Bianca Gallardo directamente de Las Juntas.***** No es fácil encontrar palabras para desde este espacio enviarle nuestras mas sinceras condolencias a Jorge Olmos Contreras por el fallecimiento de su madre, doña Juana Contreras Rufino. Son momentos difíciles pero sabedores estamos de que hay fortaleza para superar este mal trance.