Rafael Cervantes, vuelve al PRI

Rafael Cervantes, vuelve al PRI

A una o dos semanas de la elección en Nayarit, alguien escribió (si la memoria no falla fue Rubén Gómez Bernal) que Rafael Cervantes Padilla había dicho “chinguen a su madre los de Vallarta…”.

La supuesta referencia fue a los priistas enviados de Puerto Vallarta que en varias brigadas ayudaban al barrido priista en las comunidades de Bahía de Banderas para derrotar al candidato en ese entonces del PAN a la alcaldía. Al final, el PAN ganó las elecciones.

Ayer se supo que Rafael Cervantes Padilla regresa al PRI. Aquellos mismos panistas que se sintieron agraviados por Cervantes Padilla, apenas supieron de la noticia del retorno del alcalde badebadense al PRI y festinaron en grande. Aplaudieron y le abrieron las puertas del tricolor.

Caso contrario, los panistas de allá y de acá de Puerto Vallarta se indignaron ante la noticia. Particularmente ciudadanos sin partido deseosos de echar fuera de la alcaldía al PRI de Héctor Paniagua, están molestos con la noticia. Proponen organizarse y hacerle un plantón para sacarlo de la presidencia municipal, hacer un plebiscito y exigirle al PAN que propongan su renuncia.

La noticia del fin de semana llegó de Michoacán. Frente a la elite priista, el dirigente nacional Humberto Moreira, el presidenciable, Enrique Peña nieto, varios gobernadores y el candidato al gobierno de Michoacán, Fausto Vallejo, el gobernador cora, Roberto Sandoval les anunció su nuevo reclutamiento. Para luego, Moreira se quiso su saco rojo y se lo colocó al alcalde charro de ese municipio que muy pocos conocían. No sabían que es Bahía de Banderas pero todos al unísono aplaudieron y sonrieron.

En Michoacán muy pocos saben de Bahía de Banderas. Nadie conoce a Rafael Cervantes Padilla, su alcalde. Pero se hizo el intento de presentarlo cual su el nuevo recluta fuese una figura de primera línea. Roberto Sandoval y el propio Cervantes se dieron cuenta que el impacto mas fuerte fue en Nayarit, en Bahía de banderas y en Puerto Vallarta. Aquellos que recibieron la mentada literalmente organizan  una fiesta. Todos los priistas vallartenses festejaron el regreso al PRI de Cervantes. Todos. Nadie se acordó de aquellas mentadas consignadas por Rubén Gómez Bernal, el famoso “Matanchen”.

Otras ves la clase política se conduce como si no tuvieran memoria. Rafael Cervantes es una hechura del PRI. Se fue al PRI porque no lo dejaban ser alcalde. Supo que mientras en el PRI mandara Héctor Paniagua, caciques de la piel de un Celso Humberto Delgado, Rigoberto Ochoa  o Ney González, jamás sería presidente municipal de Bahía de Banderas. Pero, en el PRI se quedó toda su familia. En la pasada administración, uno de sus hermanos, Gabriel, fue regidor. Ya en el PAN, a los primeros meses, supo que había cometido un error al irse al PAN. Ese no era el partido que pensó. No existía la democracia pura que tanto pregonan los panistas. Ganó la candidatura en una convención pero al final, se le arrebataron y se la dieron al derrotado, Ramón Saldaña morones. Le ofrecieron la diputación local plurinominal y lo hicieron coordinador de la fracción. Lo desconocieron de esa coordinación. Aguantó. Volvió a ser candidato y ahora lo mantuvieron hasta ganar.

La información ahí esta para quien desee consultarla. En su campaña se rodeó de priistas y en su administración, abundan priistas. los amigos de Rafa Cervantes cuentan la historia de que ya en plena campaña, el candidato se quejaba del escaso apoyo de su partido el PAN. Pensó que otra vez deseaban verlo perder. Se acercó a sus amigos priistas y pactó compromisos. Muchos le ayudaron a ganar.

Cervantes Padilla tenía claro que el PAN lo abandonó en campaña. Las dudas se le aclararon cuando supo del cómputo de votos. El PAN perdió de calle la diputación distrital. Perdió todas las demarcaciones. Solo él pudo ganar y por escaso margen. Platicaba que si el PAN hubiera trabajado con él y con los demás candidatos, se hubieran ganado, no solo la alcaldía sino a diputación local y las regidurías.

Pero, la mano priista no solo se vio en los días de campaña. Basta ver los nombres de los principales colaboradores en la administración municipal de Bahía de Banderas. Abundan nombres de priistas. son mas priistas que panistas. Eso fortaleció la percepción de la estrecha cercanía del alcalde con el priismo de Bahía de Banderas. Es mas, meses atrás, muchos aseguraban que él era el plan b de Héctor Paniagua para la candidatura.

A muchos amigos de Cervantes se les cae la cara de vergüenza. No son panistas pero se declaran antipriistas, sobre todo declarados enemigos de Héctor Paniagua. No asimilan que su amigo retorne al PRI. Se quejan de haberle ayudado para ser alcalde peor jamás para regresar al PRI.

El caso de Rafael Cervantes demuestra una vez más que en la clase política lo de menos es la rectitud, la coherencia, principios o valores. Lo que existe es la conveniencia personal y los intereses. Por eso y mas, el propio PAN ha perdido credibilidad y simpatizantes y Cervantes es uno de ellos que ya no cree en Acción Nacional. Cuando creyó lo humillaron y victimaron. Ahora, la conveniencia es aproximarse al PRI, partido que esta en el umbral del retorno a Los Pinos. Eso lo sabe Cervantes y desde la posición que le dio el respaldo popular se dispone a explotarlo al máximo. Algún día se revelará el secreto y alcance de su negociación. Solo un político se presta a una escena en donde permite se le exhiba como un trofeo de guerra.

Los políticos, en este caso de Nayarit arrastran un profundo desprestigio. Ejemplos de chapulines abundan. Nos acordamos de la señora Martha Elena García de Echevarría que de ser diputada federal por el PRD, se hizo candidata a gobierno del estado por el PAN. La dama, antes fue priista pero también coqueteó con el Partido del Trabajo y con Convergencia, partido ambos coptados por el su esposo el ex gobernador Antonio Echevarría. Ahí están las historias de Ismael “el maylon” Duñalds, que del PRI se fue al PAN y se ahí saltó al PRD; y el ejemplo de Oscar Valenzuela, que en unos meses vistió todos los colores a su alcance.

Hay quienes lo proponen y le piden a Cervantes renunciar a la presidencia municipal. El argumento es simple; la alcaldía la ganó el PAN y los ciudadanos votaron por el PAN, por un candidato panista y no por un priista. Eso no ocurrirá. Tampoco se le someterá a un plebiscito, figura borrada de las leyes de Nayarit. No renunciará porque es ese el valor adquirido por el PRI. Si el PRI gana las elecciones del pasado 7 de julio, su valor sería de cero. Sin la alcaldía no vale nada.

Revolcadero

Algunos conocidos nos comentaron que Rafael Cervantes Padilla se aventó al ruedo de tres colores con una idea en mente: combatir hasta eliminar al grupo político del ex alcalde Héctor Paniagua Salazar. Nosotros no creemos en esa versión pues para creer semejante teoría el primer paso que debe dar el charro es hurgar en la administración rastros y huellas para llevar a los tribunales a Paniagua. Y eso es difícil de verlo porque si algo tiene Rafa Cervantes es de tener un carácter débil. Él nunca se enfrentará a nadie porque, si algo le reclaman sus colegas charros es de no poseer muna hombría a carta cabal. Lo podrá empujar el cuñado Pepe Gómez o su amigo Omar Reynoso pero no moverán de su zona de confort. ***** En facebook, Rafael Cervantes Padilla publicó: “Primero que todo, el gobernó que encabezo no se rige por  colores ni partidos, es un gobierno de bahiabandenses para trabajar precisamente por Bahía de Banderas, el gobierno del cambio seguirá trabajando por el progreso de nuestro municipio, mi lealtad y compromiso es con el bienestar del pueblo de Bahía”. Quien sabe si escribió para creerle, para que le crean los incrédulos, o es otro discurso hueco y demagogo.***** Recomendamos analizar con lupa la separación del abogado Jorge Antonio García Rojas a la dirección de Seguridad Pública Municipal. Esto pudiera ser un primer mensaje otros desenlaces que estarían por ocurrir. Nos han asegurado que en la cuerda floja hay influyentes y poderosos elementos de esa corporación. Por ahora nos reservamos detalles de lo que entre policías mucho se platica. Por lo pronto, es sano para García Rojas su paso atrás.