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Cibernautas conjeturan relación entre casos sangrientos y zombis

domingo, 3 de junio del 2012

 

Primero fue Miami: el caso de dos hombres desnudos cerca de una autopista en el que uno le comió casi toda la cara al otro. Luego en Texas: una mujer acusada de matar a su recién nacido, de comer parte de su cerebro y arrancarle a mordidas los dedos gordos de los pies. Después en Maryland, un universitario le dijo a la Policía que mató a un hombre, antes de comer su corazón y parte de su cerebro.

Hubo otro caso, aunque diferente, en Nueva Jersey. Un hombre se acuchilló 50 veces y le arrojó partes de sus propios intestinos a la Policía. Los agentes le arrojaron gas lacrimógeno, pero no les resultó fácil someterlo.

Los internautas comenzaron a decir que ese hombre se comportó como un zombi. El asunto siguió creciendo tanto que parecería que no hay otro tema en internet.

Los casos verdaderos son espeluznantes, pero incluso fascinantes por la manera en los que la gente los menciona. En un Estados Unidos donde el imaginario zombi es utilizado para promover todo, desde herramientas y armas hasta gnomos vigilantes, no se puede más que comparar las semejanzas en esos incidentes.

La gente ya parecía acostumbrada a las noticias de violencia. ¿El canibalismo? Eso parece diferente por completo.

Tantas cosas extrañas han llegado a los principales espacios noticiosos en los últimos días que la publicación digital The Daily Beast armó un mapa de Google para seguirle la pista a “ejemplos que podrían ser el precursor de un apocalipsis zombi”.

La agencia federal estadounidense que rastrea enfermedades también intervino en el debate, para insistir en que no hay pruebas de que estuviera en desarrollo alguna crisis sanitaria relacionada con los zombis.

Los casos en sí mismos no tienen nada de divertidos. En cada uno participa gente ya sea sospechosa de cometer actos indescriptibles o arrastrada por éstos debido a motivos todavía desconocidos. Quizás, tampoco, sea algo nuevo: La gente le hace al prójimo cosas horribles todos los días.

Pero entonces surge la pregunta sobre qué es lo que hace que términos de búsqueda como “apocalipsis zombi” se volvieran una tendencia de lectura la semana pasada en múltiples rincones de internet, alentada por discusiones y mensajes que con frecuencia fueron catalogados como humorísticos.

“Han oído de esas películas de zombis y hacen bromas sobre eso”, opinó Lou Manza, un profesor de psicología en la universidad Lebanon Valley College en Pensilvania, quien se enteró de todo el asunto mientras almorzaba el viernes con su hijo de 18 años, quien bromeó diciendo que “el apocalipsis zombi” era inminente.

Símbolos tanto de la infección como de la maldad, los zombis están causando terror de una manera diferente a la iconografía de las otras películas de horror, consideró Elizabeth Bird, una antropóloga de la Universidad del Sur de la Florida.

La ansiedad por la situación económica en el planeta tampoco ayuda en asuntos como en Grecia, Italia y España, donde su situación pareciera complicarse cada día. Entonces hay que analizar algunos de los términos que generan esos temores: bancos zombis, economías zombis, gobiernos zombis.

Además, hay mensajeros eficaces. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC por sus siglas en inglés) intervino en el asunto de los zombis el año pasado cuando utilizó la palabra “apocalipsis” para llamar la atención hacia su ciberpágina de preparación para emergencias.

La palabra funcionó, pues atrajo a jóvenes que de otra manera no hubiesen leído el instructivo de esa institución federal sobre la planeación de rutas de escape y el almacenamiento de agua y comida.

El viernes apareció un mensaje diferente. Las conversaciones sobre el tema en internet habían cobrado tal fuerza que el vocero de los CDC, David Daigle, envió un correo electrónico al periódico Huffington Post para responder a preguntas sobre la posibilidad de muertos vivientes entre los humanos.

“Los CDC no saben de ningún virus ni enfermedad que resucite a los muertos”, dijo Daigle y agregó: “(Ni de ninguna que muestre síntomas tipo zombi)”.

Los zombis han estado en la cultura general al menos desde que la novela “Frankenstein”, de Mary Shelley, fue publicada en 1818, aunque la clásica película de horror en blanco y negro “Night of the Living Dead” (La noche de los muertos vivientes) llegó a las pantallas en 1968.

En los últimos años, los zombis se han vuelto un tema muy popular y un negocio muy rentable. A finales del año pasado, el cibersitio financiero 24/7 Wall Street estimó que los zombis han introducido 5.000 millones de dólares a la economía estadounidense.

De cualquier manera, el tema es familiar para George Romero, quien dijo a The Associated Press en 2008 que todas sus películas de zombis han sido sólo eso, películas.

“Los zombis podrían ser cualquier cosa”, expresó. “Podrían ser una avalancha, podrían ser un huracán. Un desastre aquí y allá. Los relatos se refieren a la manera en que la gente puede no responder de la manera adecuada”.

 

AP

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