Leticia Arana
La carestía de vivienda ya sea para renta o venta, que de 2013 a esta fecha, se ha duplicado debido a las fluctuaciones del mercado, dejan indefenso al trabajador en Jalisco, cuyo salario promedio mensual, es de ocho mil 418 pesos, monto insuficiente, considerando que debería de invertir para este rubro, una cantidad que no supere el 30 por ciento de sus ingresos, a fin de no verse “ahorcado”, precisa titular del IIEG, Augusto Valencia , al presentar análisis económico de noviembre:
“…La variación acumulada en ese periodo, es de 105 por ciento; en contraste ,el ingreso mensual promedio nominal, creció 52 por ciento, entre 2013 y 2022. Un Jalisciense promedio, solo podría pagar dos mil 525.4 pesos al mes. Un ejercicio que realizamos, arrojó que para poder comprar una vivienda con un valor de 500 mil pesos con un enganche de diez por ciento y esquema de pagos a 20 años, se requiere contar con ingresos de casi 16 mil pesos mensuales, con un pago mensual de alrededor de cinco mil 300…”
Detalla que, para el caso de una vivienda de un millón de pesos, también a 20 años y con enganche de diez por ciento, el empleado necesita tener ingresos de por lo menos, 32 mil pesos y pagar mensualmente, poco más de diez mil pesos. Por nivel de percepciones, añade, el 44.5 por ciento gana más de uno y hasta dos salarios mínimos, mientras que el 19 por ciento, entre dos y tres salaros mínimos. El 4.7 por ciento, gana más de tres o hasta cinco salarios mínimos y solo el 1.2 por ciento, percibe más de cinco salarios mínimos.
Las rentas para una vivienda media, agrega, rondan, en zona metropolitana de Guadalajara, entre los 15 y 20 mil pesos.
Por otro lado, destaca que la pobreza laboral, impide adquirir la canasta alimentaria básica, con un sueldo que está 25.2 por ciento abajo del promedio nacional inferior, que es del 40.1 por ciento.