Redacción
Prensaglobal.com
Diana Lorena era una abuelita de 63 años que tenía viviendo dos semanas en playa flamingos cuando una noche, José Luis González Esparza o Miguel Alanis Ruvalcaba (Fiscalía no sabe cuál es su verdadero nombre) la acechó, la golpeó, la violó y a consecuencia de ello, falleció. Hoy un Tribunal de enjuiciamiento lo declaró culpable de Feminicidio y lo sentenció a 47 años de prisión.
La semana pasada se llevó a cabo el juicio por este caso en el Juzgado de Control y Oralidad de Puerto Vallarta, pero el Tribunal de Enjuiciamiento estuvo compuesto por tres jueces del Centro de Justicia para la Mujer. Ellos determinaron una pena de 47 años solo por el delito de Feminicidio, ya que la Fiscalía de Jalisco no aportó las pruebas suficientes para acreditar la violación.
La indemnización por pérdida de vida se estipuló en 448 mil 100 pesos, gastos funerarios por 33 mil 640 pesos, gastos médicos por 19 mil 942 pesos, atención psicológica para la hija de la víctima 15 mil 600 pesos y una multa de 56 mil pesos.
Cade resaltar que después de un año, la Fiscalía de Jalisco no pudo definir a ciencia cierta el nombre del Feminicida, por lo que fue juzgado con los dos nombres: José Luis González Esparza o Miguel Alanis Ruvalcaba.
La historia
La madrugada del lunes 21 de junio, en una casita de campaña en la playa de Flamingos, Diana Lorena tenía un par de semanas viviendo.
Un día antes, el tipo estuvo observándola, de acuerdo a testigos. Fue a la 1 de la madrugada del lunes cuando un joven de 18 años escuchó que estaban golpeando a alguien. Llama a la policía y cuando llegan ven que la casa de campaña está abierta por el cierre. Ven a un hombre grande, corpulento encima de una mujer. Él los ve, se pone unos boxers rojos y sale. En las manos tiene sangre.
Al entrar a la casa de campaña, ven a una señora ya mayor muy golpeada, está medio inconsciente, hay sangre por todos lados, la ayudan a ponerse de lado para que no se ahogue con la sangre que emana de su boca. Tiene las pantaletas en las rodillas.
Ahí es cuando detienen a José Luis o Miguel por primera vez, ese 21 de junio. Al día siguiente es presentado al juez Mario Murgo Magaña quien lo deja en libertad. Y es que de acuerdo al juez no se comprobaba “violencia sexual” o lesiones aunque fue detenido en flagrancia.
La Policía detuvo a José ese 21 de junio en flagrancia. El Presidente del Supremo Tribunal de Justicia de Jalisco presionó para que hubiera una orden de aprehensión. El Consejo de la Judicatura suspendió al juez que lo liberó. La Comisión Estatal de Derechos Humanos de Jalisco abrió una queja para investigar el proceder de las autoridades involucradas.
La Policía Municipal de Puerto Vallarta volvió a tener datos del paradero del sospechoso y logró su detención semanas después.