Leticia Arana
El hecho de que Jalisco se encuentre en el lugar 17 a nivel nacional por incidencia de delitos del fuero común o patrimoniales, que han repuntado considerablemente, respecto a los de alto impacto como el secuestro, fortalece proyecciones y retos para revertirlos, afirma el fiscal estatal, Eduardo Almaguer Ramírez, al garantizar que con y a pesar de ello, la entidad está en paz, pues en el caso del secuestro, reportan disminución de 57 por ciento, ya que en 2016 a esta fecha daban cuenta de siete y ahora solo tres y en feminicidios, de 18, se pasa a cuatro:
“ …Sin embargo hay que ser claros y realistas, tenemos un aumento en promedio de más del 50 por ciento de robo en todas sus variantes, del robo a carga pesada, de robo a negocios, a personas, a vehículos y a casa habitación. En Jalisco, se ha implementado una estrategia de seguridad pública muy importante, bases regionales, equipamiento, inteligencia, policía de élite; en la Fiscalía hemos implementado cero tolerancia a la corrupción e impunidad, 408 integrantes han sido despedidos, suspendidos o consignados, pero han ingresado 815 buenos ciudadanos. Como nunca prevalece comunicación, inteligencia, coordinación, por eso el Estado está en paz, está en paz el Estado, con grandes retos, pero en paz…”
Subraya a la vez la necesidad y en coincidencia con el Ejecutivo estatal, de presentar iniciativas de reforma al código penal del Estado y la sugerencia al Congreso federal para que se modificado también el Código Nacional de Procedimientos Penales a fin de que pueda incluirse la figura de antecedentes policiales.
Por cierto, este martes en Casa Jalisco, el gobernador, Aristóteles Sandoval, acordó con nueve alcaldes de la zona metropolitana, fortalecer y mejorar el modelo de seguridad bajo el esquema de coordinación conjunta. Del mismo modo, se determinó que remitirán al Congreso de la Unión, propuestas para modificar aspectos del nuevo Sistema de Justicia Penal.
Respecto a la permanencia del fiscal estatal, Eduardo Almaguer, de quien se ha pedido su destitución, afirma enfático que el funcionario tiene toda la confianza para continuar, ofreciendo resultados institucionales, al margen de cualquier interés personal.