La prensa iraní denunciaba este martes las nuevas restricciones impuestas la víspera por el régimen, sin dar explicaciones, al acceso a la mayoría de los servicios de mensajería y portales de internet extranjeros, provocando críticas incluso dentro del poder político.
“El acceso a los correos electrónicos ha sido de nuevo cortado y la paciencia de los usuarios se está agotando”, según la agencia ISNA, que denunció “la perturbación que supone a las actividades de quienes utilizan internet por necesidades profesionales”.
Los accesos a las mensajerías Gmail (Google), Yahoo o Hotmail (Microsoft), utilizadas por millones de iraníes, interrumpidos durante varios días a principios de febrero, están de nuevo bloqueados, según los medios iraníes, muchos de los cuales denunciaron el martes la ausencia de información de las autoridades.
El poder “juega con los nervios de los usuarios de internet”, acusa el diario reformador Shargh en su portada de este martes, criticando el hecho de que los diferentes departamentos del ministerio de Telecomunicaciones se culpen mutuamente de las nuevas restricciones.
“El corte de los accesos a internet ha creado varios problemas a los usuarios” protesta la ‘web’ ‘Alef.ir’ del influyente diputado conservador Ahmad Tavakoli, presidente del Centro de Investigaciones del Parlamento.
“Ningún responsable de las telecomunicaciones o de los servicios de seguridad ha dado explicaciones sobre estas medidas. Aparentemente, quienes han tomado estas medidas no le dan ninguna importancia a la opinión pública y al descontento creado”, denuncia.
Las autoridades también cortaron, por primera vez, todo acceso al protocolo VPN (Virtual Private Network), que permitía hasta entonces a las empresas evitar los bloqueos para trabajar con el extranjero y a los internautas iraníes comunicar libremente con el mundo exterior a través de redes sociales como Facebook o Twitter.
Este bloqueo fue criticado por el director departamental de las tecnologías modernas en el Parlamento, Reza Bagheri Asl, quien recordó que muchas empresas “utilizan este protocolo que ofrece un nivel de seguridad elevado para intercambiar informaciones”.
AFP