Tommy Jordanes un granjero de Texas con una muy particular forma de castigar a sus hijos. El hombre se encontró con que su hija había publicado una queja en su muro de Facebook acusando a sus padres de hacerla trabajar “más que a la sirvienta”. La joven argumentaba que el arduo trabajo no le dejaba energías para salir y divertirse con sus amistades.
El ofendido padre grabó un video de ocho minutos de duración para darle una lección a su hija. Jordan leyó la carta de la joven para debatir algunos puntos en ella, y aprovechó tomar una decisión, poco ortodoxa pero efectiva: balear la laptop de su hija.
El granjero utilizó su pistola 45 mm no sin antes decirle que tendría que pagar hasta las que utilizó para acribillar el aparato. Jordan sentencia su particular castigo diciéndole a su hija que si quiere otra laptop, tendrá que comprarla ella misma. La acción del furioso padre ha sido tanto aplaudida como rechazada, por quienes creen que se trata de un castigo poco ejemplar.
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