Si bien la imagen que ha mostrado Internet del fundador de Megaupload es fastuosa, rodeado de mujeres, coches y aviones alquilados, Kim Dotcom vivía prácticamente como un recluso en una gigantesca finca a las afueras de la principal ciudad de Nueva Zelanda, Auckland.
Dotcom, también conocido como Kim Schmitz, se enfrenta a una extradición a Estados Unidos por cargos como organización de una trama que recaudó más de 175 millones de dólares infringiendo contenidos protegidos por derechos de autor en su web destinada a compartir archivos online. El ciudadano alemán, que niega los cargos, está actualmente bajo custodia en una celda, y un juez de Nueva Zelanda debe decidir antes del miércoles si le concede una fianza.
Los vecinos del barrio donde se ubica la residencia que Dotcom arrendaba, una comunidad rodeada de viñedos y clubes ecuestres, veían a veces al fundador de Magaupload en las sinuosas carreteras conduciendo alguno de sus lujosos coches, pero nadie con los que habló Reuters conocían realmente en persona al multimillonario pirata informático. “Le veíamos conduciendo por ahí, pero no es muy sociable”, ha comentado Libbi Darroch en el Coatesville Pony Club.
Los Darroch, que viven justo encima de la colina de la propiedad alquilada de más de 12 hectáreas de Dotcom, pasan frente a la entrada trasera de la finca, custodiada por una caseta y cámaras de seguridad, para ir a tiendas o llevar a su hija al colegio.
“Nunca lo he visto caminando ni nada. Creo que hace todos sus negocios en su mansión. La gente sabía que era increíblemente rico por la enorme renta que pagaba”, ha explicado Darroch.
Dotcom, de 38 años, alquila la que supuestamente es la casa más cara de Nueva Zelanda, valorada en unos 30 millones de dólares neozelandeses (24,1 millones de dólares), con un alquiler mensual de entre 30.000 y 40.000 dólares neozelandeses.
En las tiendas cercanas a Coatseville, todo el mundo contaba la misma historia: nadie había conocido realmente a Dotcom, que según algunos medios mide dos metros y pesa más de 130 kilogramos. Tampoco nadie ha conocido a su esposa, que está en avanzado estado de gestación de gemelos, o a sus tres hijos, o saben dónde van al colegio.
Desde que fijó su residencia en Coatseville en el 2010, Dotcom llevó a cabo renovaciones en la mansión por un valor de 4 millones de dólares neozelandeses, como una piscina climatizada con altavoces bajo el agua, agua mineral importada y una escalera a medida por 15.000 dólares neozelandeses, según los medios.
Pero cualquier obra en la finca, que parece un campo de golf de lujo con césped bien recortado y por la que el personal se mueve en carros de golf, está organizada por alguien de su entorno, dicen los residentes.
Dotcom gastó 500.000 dólares neozelandeses en fuegos artificiales para Auckland en el Año Nuevo de 2010, pero pocos responsables han admitido haberse reunido con él.
El ex alcalde de la ciudad John Banks dijo que se reunió con él tras su donación de los fuegos artificiales, pero que apenas conoció al multimillonario.
Todo esto contrasta con la imagen online de Dotcom, con un video en el que aparece rodeado de mujeres en topless y hombres bebiendo champán a bordo de un gran yate durante un “fin de semana de locos” en Mónaco, que costó supuestamente 10 millones de dólares.
Dotcom fue arrestado el pasado viernes en una redada de grandes dimensiones realizada por la policía de Nueva Zelanda, que estuvo apoyada por helicópteros. Durante la operación, el pirata informático fue encontrado oculto en una habitación acorazada. de su residencia.
El FBI estima que Dotcom ganó unos 115.000 dólares al día durante 2010 gracias a su imperio. La lista de los bienes incautados tras su arresto incluye cerca de 20 autos de lujo, uno de ellos un Cadillac rosado, obras de arte, y 10 millones de dólares neozelandeses invertidos en compañías financieras locales.
Reuters/EP