Jazmín Cámara
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Puerto Vallarta, Jalisco
Este jueves el director de Teatro Vallarta, Manuel Díaz Preciado, amenazó con desmantelar y cerrar operaciones del lugar si el Ayuntamiento no firmaba los documentos para el proyecto con el que bajarían más de 6 millones de pesos del gobierno federal para su espectáculo privado ‘Fandango’.
Díaz evidenció su molestia en rueda de prensa por ver en riesgo los 6.3 millones de pesos que serían etiquetados para el espectáculo Fandango – Promovido por Grupo Plexon, la empresa propietaria del teatro- , a través de Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), recurso federal al que pretenden acceder siendo una empresa privada y no una asociación civil.
Para poder llegar a este recurso requieren de la intervención del gobierno municipal, el cual según Manuel Díaz, se niega a darles el respaldo.
Por este motivo detendrían las operaciones del teatro con el objetivo de hacer presión para que se instruya al Síndico Municipal Roberto Ascencio, firmar el documento que traería la responsabilidad al Ayuntamiento de recibir, entregar y supervisar el uso del dinero. “El ayuntamiento no lo quiere recibir porque no lo quiere supervisar”, aseveró el director del teatro.
Durante la rueda de prensa se jactó de haber traído un teatro a la ciudad, el cual asegura beneficia al Puerto: “Si nosotros no hubiésemos invertido 120 millones de pesos en esto, Puerto Vallarta no tendría teatro”, puntualizó.
Además indicó que antes de iniciar operaciones, la calle que les fue “donada” por la anterior administración era un “nido de drogadictos” y que apestaba. “Yo le dije al gobierno municipal que el teatro necesitaba una calle acorde al proyecto”, dijo; y desde entonces la calle Uruguay es privada y está siendo explotada por la empresa. “Dicen que me donaron la calle, no me la he podido llevar”, señaló con tono irónico.
Engrandeció su espacio como una fuente de cultura para locales y turistas; sin embargo, abundaban los espectáculos que nada tenían que ver con esta.
Por otra parte desde el inicio de las operaciones de Teatro Vallarta, hubo decepción entre los directores de teatro locales y promotores de cultura por los elevados costos y pocas facilidades para presentar realizar sus eventos, pues no pudieron concebir este espacio como sus propietarios lo han planteado.