México, que preside el G20 desde el pasado 1 de diciembre, trabaja para que se alcancen en el seno de este grupo compromisos de políticas que mejoren la confianza a nivel internacional de modo que se pueda entrar en la senda de la recuperación a nivel global.
Miguel Messmacher, jefe de la Unidad de Planeación Económica de la Secretaría de Hacienda Pública de México, y portavoz de la presidencia mexicana del G20, dijo que “va en interés de todos los países del G20, tanto los industrializados como los emergentes, buscar soluciones cooperativas que nos permitan avanzar”.
En entrevista con Efe, el responsable mexicano resumió así el reto más importante que su país afronta como presidente de este grupo en un momento de turbulencia financiera internacional que, si bien ha afectado sobre todo a Europa y Estados Unidos, ya está provocando una desaceleración del crecimiento en los países emergentes.
Por ello, de cara a la cumbre de junio de líderes del G20 en Los Cabos, en el estado de Baja California Sur, la presidencia mexicana llevará en su agenda, de forma prioritaria, la búsqueda “del fortalecimiento del sistema monetario internacional y de compromisos de política más fuertes de los diferentes países”.
En ese sentido, Messmacher señaló que “creemos que la propuesta europea de incrementar los recursos disponibles del FMI es adecuada, y se trata de trabajar para generar consensos”.
En paralelo a ello, dijo que “seguimos necesitando compromisos de política más fuertes de los diferentes países. La situación global hoy en día está centrada en Europa, pero no solo hay problemas en Europa, los hay en diferentes regiones del mundo”.
“Vamos a intentar promover que haya discusiones sobre la situación en todos los países del G20 y que haya un compromiso de política más específicos en cada uno de ellos, para poder generar una especie de pinza, con el fortalecimiento de las instituciones internacionales”, insistió.
El hecho es que, como consecuencia de la situación global, en varios países emergentes se está dando un proceso de menor crecimiento, de desaceleración.
“Hasta el momento están manteniendo tasas de crecimiento relativamente elevadas, no ha habido ningún país emergente que haya caído en recesión o que se espera que caiga, pero se está dando un debilitamiento del crecimiento a nivel global y obviamente sería inocente pensar que hay algún país invulnerable”.
En el caso de México, dijo que “la economía creció probablemente un 4 por ciento en 2011, y aunque debido a la situación global, el crecimiento va a disminuir en 2012 hasta el 3,5 por ciento, la situación aún es buena”.
El objetivo es que, al igual que de las últimas cumbres de Cannes y Seúl salieron sendos Planes de Acción, se logre en junio un Plan de Acción de Los Cabos con esos compromisos adicionales de políticas específicas.
“Nosotros vamos a hacer énfasis en que en un contexto donde los márgenes de política fiscal o de política monetaria (con tasas cercanas a 0) ya son muy apretados, será necesario buscar políticas de reformas estructurales, para aumentar la productividad, reactivar la inversión y activar el crecimiento”, afirmó.
México también tratará de “impulsar una agenda de mayor inclusión financiera”, en el que se encuentre un “compromiso adecuado” entre la necesidad de reforzar la regulación y supervisión del sistema financiero y sin detener los flujos de crédito, “que los hogares y las Pymes tengan acceso al crédito en este contexto”.
También es una preocupación de México la volatilidad de los precios de las materias primas.
“En los países industrializados, el aumento de los precios del petróleo ha deteriorado el poder adquisitivo de los hogares, y en los países en vías de desarrollo el tema es aun más delicado, ya que los incrementos de los precios de los alimentos pueden implicar más pobreza e incluso hambrunas”, señaló.
Por ello, dijo que “se debe trabajar por un mayor nivel de seguridad alimentaria y una mayor producción agrícola a nivel global”.
Finalmente, otro asunto que llevará México a la agenda de la cumbre y que es un tema de preocupación del presidente Felipe Calderón es todo lo relacionado con el calentamiento global y las políticas verdes.
“Se trata de dar un enfoque transversal a los trabajos del G20 para intentar tomar en consideración lo mas posible los diferentes temas de esta agenda ambiental”, afirmó Messmacher.
EFE