El Tribunal Superior de Londres confirmó el viernes en apelación la extradición del supuesto etarra Eneko Gogeaskoetxea a España, que le requiere por 15 presuntos “delitos de terrorismo”, y readmitió el cargo de “intento de asesinato del Rey” retirado en primera instancia.
En una sentencia escrita entregada durante una vista de apenas dos minutos los dos jueces encargados del caso rechazaron los argumentos de la defensa según los cuales el español, de 45 años, no tendrá un juicio justo en España.
“No hay obstáculos para la extradición a España del apelante”, dice literalmente la sentencia de los jueces John Griffith Williams y John Laws, que estimaron que las órdenes europeas de arresto emitidas en su contra por las autoridades españolas “no son incompatibles con sus derechos humanos”.
Los jueces aceptaron, en cambio, el recurso del abogado que actúa en representación de las autoridades españolas para que se readmitieran los cuatro cargos contenidos en las euroórdenes que fueron retirados en el fallo de primera instancia. Sin esta decisión el acusado no hubiera podido ser juzgado en España por estos cargos.
“La orden de la jueza de primera instancia que retiró al apelante los delitos de intento de asesinato del rey de España y tres cargos de robo de vehículos queda invalidada”, agrega la sentencia.
Gogeaskoetxea, recluido preventivamente desde julio, no estuvo presente en los juzgados, pero tiene todavía la posibilidad de interponer un último recurso ante la Corte Suprema.
Sus abogados, contactados por la AFP, dijeron que no se había tomado todavía una decisión.
Gogeaskoetxea, presunto miembro del comando ‘Katu’ de la organización separatista armada vasca, está acusado de matar a un policía durante la preparación de un atentado previsto cinco días después coincidiendo con la inauguración oficial del museo Guggenheim de Bilbao, a la que debía asistir el rey Juan Carlos el 18 de octubre de 1997.
Los otros cargos que figuran en las ocho euroórdenes emitidas por las autoridades españolas se refieren a su presunta participación en varios atentados cometidos en 1996 y 1997 que causaron daños materiales.
El presunto etarra recurrió en enero el fallo anunciado días antes por la jueza de primera instancia.
Durante la vista de apelación celebrada en marzo, la defensa de Gogeaskoetxea alegó una “flagrante denegación de justicia”, al considerar que los cargos que se le imputan se basan sólo en una confesión incriminatoria que efectuó estando “incomunicado” su primo y presunto cómplice Kepa Arronategui, y de la que luego se retractó.
Arronategui fue detenido el 13 de octubre de 2007 cuando, supuestamente con Gogeaskoetxea, disparó contra uno de los policías autonómicos vascos que les sorprendieron tratando de introducir jardineras con artefactos explosivos en el recinto del museo, y cumple una pena de prisión.
Gogeaskoetxea, descrito como un informático experto en explosivos, está recluido en la prisión de Belmarsh desde su detención el 7 de julio en Cambridge, donde vivía bajo identidad falsa con su mujer e hijos.
Incluido desde 2001 en la lista antiterrorista de la Unión Europea (UE), el presunto etarra que según las autoridades españolas integró también a partir de 1997 las “estructuras directivas clandestinas” de la organización en Francia, fue condenado dos veces en rebeldía en ese país.
La decisión sobre el caso de Gogeaskoetxea se produce al día siguiente de que el Tribunal Superior de Belfast confirmara también en apelación la extradición a España por un presunto delito de “enaltecimiento del terrorismo” de un exdirigente etarra, José Ignacio de Juana Chaos, quien se encuentra en paradero desconocido desde marzo de 2010.
ETA anunció el 20 de octubre el cese definitivo de su actividad armada, tras más de 40 años de atentados y asesinatos que causaron 829 muertos.
Eneko Gogeaskoetxea, detenido en Londres, en una fotografía sin fecha divulgada por la Guardia Civil. La justicia británica confirmó este viernes la extradición a España del presunto etarra, requerido por 15 delitos de terrorismo.