Leticia Arana
Producto de mesas de análisis interdisciplinarias, finalmente quedó decretado que son áreas naturales protegidas, tanto la Sierra El Cuale, en Puerto Vallarta, como el Bajío de Zapopan, por lo que la Secretaría del Medio Ambiente y Desarrollo Territorial, SEMADET, publicó este martes 05 de noviembre, en el Diario Oficial de Jalisco, la declaratoria para ambas regiones hidrológicas, lo que permitirá conserven más del 80 por ciento de su extensión, libre de intervención artificial, afirma titular de esta dependencia, Israel García:
“…Luego de un arduo trabajo, mucha coordinación entre el gobierno de Jalisco, y propietarios, así como ciudadanos que participaron en la consulta pública, la zona el Bajío y la Sierra de El Cuale, ya son áreas naturales protegidas bajo la categoría de área estatal de protección hidrológica. Los acuíferos son las principales reservas de agua dulce, aprovechable en las zonas poblacionales, ya que pueden ser utilizadas para amortiguar la variabilidad de la disponibilidad del agua superficial y los ciclos de sequía, principalmente en el contexto actual de cambio climático. Desde el 30 de noviembre, del año pasado, dimos inicio a las mesas de trabajo para lograr este decreto, y fue así como el once de julio de 2024, comenzó la consulta pública para llegar al día de hoy, con la publicación de este decreto, en el periódico oficial del Estado de Jalisco…”
Indica que, para la construcción de este proyecto, se elaboró un estudio técnico y un programa de manejo y conservación sometidos a amplia consulta pública, que recibió infinidad de comentarios y observaciones por académicos, especialistas, asociaciones civiles y sociedad en general que lleven al adecuado manejo y conservación de estas áreas naturales, que ya cuentan con un comité asesor institucional para garantizar o dar acompañamiento y concretar un plan maestro de regeneración.
Precisa que la SEMADET, recibió 258 folios con 647 observaciones, de las cuales 142 fueron procedentes y 95 parcialmente aceptadas. Aclara que las regiones relevantes para la infiltración de agua, se conservan en su totalidad, así como los criterios para regular las actividades productivas y lo principal, garantizar el proyecto maestro de regeneración, para la gestión de conservación