El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ) alertó hoy de los riesgos que supone ser periodista en algunos países latinoamericanos como Colombia, México o Brasil, donde son objeto de asesinato y persecución.
Tras presentar hoy en El Cairo el informe anual sobre los ataques a la prensa en 2011, el subdirector del CPJ, Robert Mahoney, explicó a Efe que “hay varios países donde es muy difícil ser periodista en Latinoamérica”.
Ese es el caso de México, donde el año pasado murieron tres informadores y donde la inseguridad y la censura se han extendido a todo el país, incluido zonas turísticas como Acapulco, debido a la presencia del tráfico de drogas y el crimen organizado, según Mahoney.
Según la clasificación del Comité para la Protección para los Periodistas, México es el octavo país del mundo donde menos se combaten los crímenes cometidos contra la prensa.
Entre los países de América Latina, a México solo le supera en impunidad Colombia, que ocupa el quinto puesto y sigue siendo uno de los lugares más peligrosos del mundo para los periodistas a pesar de los últimos avances.
Otro punto caliente es Brasil, donde la violencia contra periodistas especializados en asuntos de corrupción, narcotráfico y crimen organizado va en aumento, sobre todo en áreas remotas, apuntó el responsable del CPJ.
Además de estos casos, Mahoney recordó las luchas entre los gobiernos de algunos países y los medios de comunicación privados, como la que actualmente enfrenta al Ejecutivo argentino de Cristina Kirchner con el grupo Clarín.
El subdirector del CPJ citó también el enfrentamiento entre el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, y los propietarios de los medios privados de ese país, a quienes acusa de pertenecer a la oligarquía y la elite empresarial.
En Venezuela, el Gobierno reproduce algunos aspectos del modelo de comunicación cubano, el más represivo de la zona y caracterizado por el control de los medios, el uso de la propaganda ante cualquier crítica y la persecución de los periodistas independientes, apunta el estudio.
Mahoney también se hizo eco de la situación “preocupante” de la prensa en Ecuador tras la reciente condena contra el periódico El Universo, acusado de difamación por el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, y obligado a pagar una millonaria multa que puede suponer su cierre.
El Comité para la Protección de los Periodistas recuerda que, desde que Correa alcanzara el poder en 2007, la Administración se ha embarcado en operaciones comerciales hasta hacerse con el control de numerosas cadenas de televisión, emisoras de radio, periódicos y revistas .
En este sentido, el informe anual evidencia cómo los gobiernos de Venezuela, Ecuador y Nicaragua han invertido en grandes conglomerados multimedia con los que influyen en las agendas políticas, lo que repercute en la ausencia de un servicio público para todos los sectores sociales y con independencia política .
En todo el mundo, al menos 46 periodistas fueron asesinados en 2011, denunció hoy el CPJ, que destacó el aumento de la censura gubernamental a través de las nuevas tecnologías.