La empresa de automóviles estadounidense Ford Motor anunció hoy una inversión de 1.300 millones de dólares en su planta de Hermosillo, en el norte de México, que será el “hogar del totalmente nuevo Fusion” y del “Lincoln MKZ para Norteamérica”.
La empresa informó en un comunicado que la inversión va dirigida a la actualización de la planta de estampado (fabricación de láminas) y ensamblaje ubicada Hermosillo, en el norteño estado de Sonora, el mayor centro de producción de Ford en México.
El anuncio lo hizo el presidente de Ford Motor para la región americana, Mark Fields, en un acto celebrado en un hotel de Ciudad de México al que acudió el presidente de México, Felipe Calderón.
“El mercado del sedán de tamaño mediano es uno de los más importantes, crecientes y competitivos en la industria. Con nuestros nuevos Fusion y Lincoln MKZ tenemos las mejores opciones de vehículos en cuanto a temas de eficiencia en el consumo de combustible, calidad y tecnología para nuestros clientes”, dijo.
La inversión se ha destinado a introducir unas modificaciones en las instalaciones de Ford que existen en la capital de Sonora, y permitirá crear un millar de empleos directos y “miles de vehículos Ford Fusion y Lincoln MKZ” para abastecer a los clientes norteamericanos de Ford Motor.
En el acto, Calderón consideró una “buena noticia” el anuncio de la inversión por parte del gigante automovilístico estadounidense.
Confió en que, con los nuevos automóviles que Ford producirá en México, este país se convierta este mismo año en el cuarto exportador mundial de vehículos.
Con esta operación Ford, que lleva en México desde 1925, ha invertido ya unos 3.000 millones de dólares en la última década en sus plantas de Hermosillo, Cuautitlán Izcalli, en el Estado de México, y en Chihuahua.
Actualmente la empresa automovilística estadounidense fabrica en México los automóviles Ford Fiesta, Ford Fusion, Lincoln MKZ, así como las versiones híbridas de los dos últimos.
EFE